“Oh, entiendo. TÚ crees que esto no tiene nada que ver contigo.(…) Resulta cómico, que creas que elegiste algo que te exime de la industria de la moda, cuando, de hecho, llevas un jersey que fue seleccionado para ti, por personas como nosotros, entre un montón de cosas” Miranda Priestly. Si por algo debemos rendir culto (incluso a día de hoy) de ‘El Diablo Viste a la Moda‘ (2006) es a su icónico vestuario y frases arrolladoras que nos recuerdan por qué se trata de un clásico y una película de culto entre los fanáticos del buen vestir. Después de todo, no por nada, este filme tendrá una secuela a casi 20 años desde su estreno en la gran pantalla.
La comedia, dirigida en 2006 por el estadounidense David Frankel, nos muestra un vistazo al día a día del mundo de la moda editorial desde la perspectiva de Andy Sachs, aspirante a periodista, y la futura acolito de la implacable editora de la revista Runway, Miranda Priestly. A su vez, está inspirada en la novela homónima de la estadounidense Lauren Weisberger, que retrata las entrañas del mundo de la moda y su parte más hostil.
Guía para un vestuario icónico
Muchas películas cautivan por su trama, sin embargo, siendo la moda un foco central dentro de ‘El Diablo Viste a la Moda’ es comprensible que sea el vestuario el verdadero protagonista oculto de esta cinta, tanto así que encontramos estilismo que siguen igual de vigentes a día de hoy, dos décadas después, gracias a su limpia y redonda ejecución.
«El vestuario que Field escogió para Miranda (Maryl Streep) costó un millón de euros y es importante saber lo cuantioso de un vestuario, ya que con un presupuesto así, es mucho más fácil que salga bien» explicó Patricia Field, responsable del vestuario de otras ficciones de culto para el mundo de la moda como Sex and The City, Gossip Girl o la reciente Emily en París.
A su vez, explicó que otro de los puntos esenciales para crear estas piezas atemporales es el uso limitado del color. «Es una película muy americana, pero también francesa, con estilismos que parten del negro como base», explica.
«Durante toda la película, para vestir a un protagonista debes ser comedida y contenida, mientras que con personajes pequeños puedes arriesgarte, ya que el espectador no se cansa al verlos porque aparecen menos«, añade en alusión al personaje secundario interpretado por Blunt, «la más trasgresora con sus estilismos».
Vestuario de Channel en el Diablo Viste a la Moda
Uno de los diseños más significativos de la película, al que hace referencia EFE, es un estilismo completo de Chanel firmado por su anterior diseñador creativo, Karl Lagerfeld. «Patricia Field tuvo una decisión arriesgada, es raro que una chica joven vaya de Chanel, y fue capaz de hacer unos looks muy frescos con una firma que a veces es conservadora».
«Decidieron ser muy limpios con la estética y las siluetas, enfatizando en el peinado y esa cana blanca perfectamente peinada donde pesa el personaje, autoritaria, sin tener que levantar la voz», añadió Rodríguez. «Fueron valientes al usar pieles para este personaje, algo que muchas veces da pudor por las polémicas», añade.
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