Tan icónica como siempre, Kim Kardashian deslumbró ante las cámaras en el final de la Semana de la moda de Alta Costura de París, robándose todo el protagonismo que su madre Kris y su hermana Kylie Jenner pudieron obtener en los días anteriores de este ‘Fashion Week’.
Como siempre, la familia Kardashian/Jenner sabe lo que hace, encontrando siempre la forma de ser protagonistas en cada evento al que van. La presentación de la firma Margiela, junto al diseñador John Galliano, no fue la excepción, y es que, si Kylie fue la estrella invitada que resaltó durante la pasarela de Jean Paul Gaultier, la empresaria y dueña de la marca ‘Skims’ fue quien más brilló en esta ocasión.
El vestido de Kim Kardashian
Luciendo un elegante vestido negro largo, Kim apareció con una propuesta diferente, con escote en forma de corazón y perforado, estrechando su figura escultural y dándole forma de una sirena. Como complementos, a este vestido le siguió una gargantilla grande y plateada que cubrió todo su cuello hasta llegar a tocar su atuendo.
Su cabello por otra parte iba suelto, cayendo alaciado en dos mechones hacia adelante y el resto a su espalda. Sin embargo, quizás el detalle más importante fue el uso de un par de zapatos Tabi negros en honor al diseño más icónico de la marca.
Junto a Kim Kardashian, Kris Jenner también asistió al desfile de Margiela en París con un atuendo un poco más sobrio, optando por un traje ‘oversize’ arregangado, blusa blanca y guantes de opera en color negro que le dieron un aire más sofisticado.
Por su parte, Kylie vistió con un atuendo de lentejuelas palteadas ceñido al cuerpo, con mangas y escote en corte redondo. En sus brazos, lució una tela transparente, y su calzado, unos tacones en color blanco.
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