Hoy es el Día Internacional de la Comida Picante, y a los amantes del picor, les traemos una peculiar salsa exótica que resulta ser toda una delicia culinaria. Dulce, agria y un poco picante, la salsa Thai combina todo lo que un buen aderezo necesita para resaltar con su sabor único los platillos de la mesa, sirviendo como acompañante para una gran variedad de aperitivos.
La receta proviene de Tailandia y, encuentra su origen en la fusión de la cultura india y la china, manteniendo las características particulares de que posee la comida en esta región de Asia.
Comúnmente, este aderezo se combina muy bien con platillos como el cerdo thai, wantán y tofu, además, puede servir con cualquier tipo de carne, pescado y mariscos. Otras opciones pueden ser alitas de pollo, pollo frito, empanadas y nachos, u otro tipo de bocadillos.
Sigue los siguientes pasos y podrás preparas una salsa Thai exquisita para deleitar a tus comensales.
Ingredientes
- Chiles tailandeses o algún tipo de ají picante (3 unidades).
- Pimentón rojo (½ unidad).
- Dientes de ajo (2 unidades).
- Cebollín picado (1/4 taza).
- Cilantro picado (1/4 taza).
- Jengibre rallado (1 cucharada).
- Salsa de soja (1 cucharada).
- Aceite picante (2 cucharadas).
- Vinagre de arroz o vinagre blanco (1 taza).
- Agua (1 taza).
- Azúcar moreno o miel (2 cucharadas).
También puedes añadir un toque de salsa de pescado u ostras a tu preparación para darle un toque especial (1 Cucharadita).
Salsa Thai
- Coloca el chile en una olla junto con el ajo y el pimentón. Añade media taza de vinagre, media taza de agua y todo el azúcar, luego comenzarás a cocinar a fuego medio alto por cinco minutos. La idea es que los ingredientes queden tiernos.
- Retira la olla del fuego y deja que los ingredientes reposen hasta que queden a temperatura ambiente.
- Una vez pasado un tiempo, muele o tritura los ingredientes hasta formar una mezcla compacta y con textura, en caso de ser necesario, en este paso puedes añadir más agua o vinagre hasta que se forme el espesor deseado.
- Precalienta un sartén con el aceite (de preferencia un wok) a fuego medio, y coloca la mezcla para comenzar a sofreír. En este paso, debes añadir el jengibre rallado y las salsas, sin dejar de remover con la paleta. Una vez pasados tres minutos, retira el sartén del fuego y deja reposar la mezcla.
- Con el preparado ya frio, solo agrega cebollín y cilantro. En este punto, la salsa Thai ya está lista para comer. Puedes guardarla en un recipiente de vidrio y está durará por una semana almacenada en tu refrigerador.
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